Una de las zonas de acúmulo graso que más preocupan a la mayoría de las pacientes que acuden a nuestra clínica es la región posterior del brazo, lo que comúnmente se denomina el pliegue tricipital. ¿Cómo lo tratamos?
Las dos técnicas que utilizamos son la liposucción y la braquioplastia (o dermolipectomía de brazos o lifting de brazos).
LIPOSUCCIÓN BRAQUIAL
La liposucción más habitual en el brazo es la liposucción de la cara posterior, muchas veces asociada a la liposucción de la espalda o los flancos. En raras ocasiones, si hay mucho exceso de grasa en toda la circunferencia del brazo será necesario liposuccionar también la cara anterior. La cicatriz es prácticamente inapreciable, una en la región posterior del hombro y otra en la región del codo.
La indicación de liposucción es:
Exceso mínimo o moderado de grasa.
No sensación de descolgamiento: Brazo compacto, sin flaccidez.
Pacientes jóvenes: Cuanto más joven, mejor retracción de la piel, de modo que merece la pena intentar un tratamiento “sin cicatriz”.
BRAQUIOPLASTIA (también llamado dermolipectomía de brazos o lifting de brazos).
Consiste en la eliminación de piel y grasa de la región posterointerna. La cicatriz queda en la cara posterointerna del brazo y con una extensión horizontal o vertical en la axila. Su indicación es:
Exceso severo de grasa y piel.
Gran descolgamiento de piel en brazos sin exceso de grasa.
Pacientes de edad avanzada: a mayor edad, peor retracción cutánea.
¡Atención!: La cicatriz de la braquioplastia es una cicatriz larga, con mucha tendencia a hacer cicatriz hipertrófica o a ensancharse. La maduración de la cicatriz puede tardar hasta un año y medio, y a menudo puede ser necesario algún tipo de retoque de cicatriz en casos de cicatriz hipertrófica.